Lo primero que deberá hacerse para comenzar a construir una estación meteorológica es tener algunas herramientas necesarias. En primer lugar, todos necesitarán vaciar el termómetro; con el termómetro veremos la temperatura exterior y no la temperatura de nuestro cuerpo. Eso es importante porque te permitirá saber si el agua está caliente, tibia, fresca o fría. Luego, necesitarás un higrómetro. Esta herramienta mide la humedad, la cantidad de vapor de agua en el aire. Finalmente, necesitarás un anemómetro, una herramienta especial que te indica qué tan rápido sopla el viento.
Una vez que hayas insertado tu termómetro, es hora de colocar tu higrómetro afuera. Solo asegúrate de colocarlo en un lugar donde no se moje con la lluvia. Esto es especialmente importante ya que si se moja, no te dará lecturas correctas. Al igual que el termómetro, también puede colocarse a la sombra para protegerlo del sol directo.
¡Por fin, es tu momento de usar el anemómetro! Sácate afuera donde pueda captar el viento fácilmente.
Una vez que estés listo para ensamblar tu estación meteorológica, lee y sigue las instrucciones de cerca. Por esa razón, es realmente importante asegurarse de que todo esté nivelado y todo esté seguro. Asegurarte de que las lecturas sean precisas te dará confianza en la información obtenida de tu estación meteorológica.
Incluso puedes hacer un barómetro fácil con un frasco de vidrio, un globo, una pajilla y algo de cinta. Llena un frasco con agua y cubre la parte superior con un globo. Luego, pega la pajilla en el lado superior del globo. El cambio en la presión del aire hará que el globo suba y baje, y cuando el globo sube y baja, la pajilla lo sigue. Añade algunas cosas básicas para rastrear la elasticidad sin dispositivos sofisticados.
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